Mis Blogs.

Mis Blogs son: Actual (Actualidad y Aficiones), Heródoto (Ciencias Sociales, Geografía e Historia), Plini (Ciències Socials, Geografia, Història i Història de l’Art), Lingua (Idiomas), Oikos (Economía y Empresa), Paideia (Educación y Pedagogía), Sophia (Filosofía y Pensamiento), Sport (Deportes), Thales (Ciencia y Tecnología), Theos (Religión y Teología), Tour (Viajes), Altamira (Historia del Arte y Arquitectura), Diagonal (Cómic), Estilo (Diseño y Moda), Pantalla (Cine, Televisión y Videojuegos), Photo (Fotografia), Letras (Literatura), Mirador (Joan Miró, Arte y Cultura), Odeón (Ballet y Música).

martes, octubre 22, 2024

Joan Miró en 1917.

Joan Miró en 1917.

La primera gran noticia internacional de 1917 es el estallido de la revolución rusa de febrero, a la que tras una larga crisis sigue en octubre una nueva revolución, esta vez comunista, iniciando el proceso que llevará a la URSS y marcando indirectamente el devenir político español desde este mismo año.
EE UU declara la guerra a Alemania el 2 de abril, lo que llevará a la postre a la definitiva victoria aliada. 
Entretanto, en España se incrementa el malestar económico-social, debido a la inflación ocasionada por la I Guerra Mundial y la guerra de Marruecos, y sigue una grave crisis política, iniciada por los oficiales reunidos en las Juntas de Defensa militar, y continuada por la burguesía catalana desde que Cambó y su Lliga exigen la convocatoria de Cortes, por los radicales republicanos y por el proletariado organizado por los socialistas y los anarquistas. Al cabo se reúne una Asamblea de Parlamentarios que pide a la vez unas Cortes Constituyentes, un pacto republicano y la autonomía catalana. Todo culmina en la huelga general revolucionaria del 13-17 de agosto, que es sometida por el Ejército, con el apoyo de la Iglesia, de los partidos monárquicos y, decisivamente, de la burguesía reformista española, incluida la Lliga catalana, que ha moderado sus pretensiones ante el peligro de una revolución izquierdista. La represión en Barcelona causa 32 muertos, cientos de heridos y 2.000 detenidos (entre ellos Companys) —Miró es soldado en este preciso momento y participa de refilón en estos eventos—. 
Desde este momento el ejército interviene crecientemente en la vida política del país y comienza un periodo de gobiernos de concentración en los que participan casi todos los partidos del sistema, pese a lo cual entre 1917 y 1923 hay trece cambios de gobierno y treinta crisis parciales que agravan la imagen de irreparable crisis de la política española. 
La Lliga padece en medio de la crisis la pérdida de su máximo dirigente: Prat de la Riba muere el 2 de agosto y, después de un interregno, Puig i Cadafalch le sucede el 29 de noviembre en la presidencia de la Mancomunidad. La Lliga colabora ahora en el Gobierno central, en el que Cambó es ministro, sin conseguir por ello una mayor autonomía, lo que promueve que los catalanistas más radicales se alejen de ella. 
Es en este contexto de separación entre los catalanistas conservadores y avanzados, que Miró comienza a alejarse de los primeros, a medida que la represión ideológica vaya cerrando las salidas profesionales a un arte vanguardista e independiente en Cataluña, como pronto comprobarán en sus carnes Torres García, Barradas… y el mismo Miró que ve como su exposición individual de 1918 es denostada por radical en este ambiente retrógrado.
Mientras, en 1917, pese a las dificultades bélicas, la vanguardia se abre paso en Francia y el resto de Europa. En la neutral Holanda, Mondrian y Van Doesburg publican el primer número de la revista neoplasticista “De Stijl” y desarrollan una pintura abstracta geométrica, que llegará a influir en Miró a principios de los años 30. En París, Duchamp escandaliza al enviar un urinario, su ready-made Fontaine, al Salon des Indépendants. El poeta Reverdy publica la revista “Nord-Sud”, que Miró lee con fruición —Reverdy defiende la teoría de la estrecha relación poesía-pintura, que será aprehendida entonces por Breton y Aragon[1]—, mientras Apollinaire estrena el 24 de junio su obra Les Mamèlles de Tirésias, subtitulado “un drame surréaliste”, que será una de las más importantes fuentes literarias de Miró en los años 20. 


Cartel parisino de Parade.

El ballet vanguardista Parade se estrena en mayo en el Thëàtre du Châtelet de París, con música de Satie, guión y dirección de escena de Cocteau, coreografía de Massine, y decoración y vestuario de Picasso; el programa contiene un texto de Apollinaire con la primera referencia al “su-réalisme”; Miró quedará impresionado al contemplar este ballet en el Liceu de Barcelona en noviembre.
Ese mismo mes, fallecen el escultor Auguste Rodin (17 de noviembre) y el pintor Edgar Degas (26 de noviembre), reforzando la sensación entre los jóvenes vanguardistas de que la generación de los grandes impresionistas se desvanece y ellos son el relevo, de lo que se hacen eco las páginas culturales de la prensa. En Barcelona, el escultor Manolo Hugué expone con éxito en las Galerías Layetanas, y un numeroso grupo de artistas y escritores exiliados extranjeros como Arthur Cravan, Albert Gleizes, Marie Laurencin..., se refugia en la ciudad y los pueblos costeros de su entorno[2], al tiempo que Picabia, bajo los auspicios de Dalmau, publica “391”, siendo tanto el grupo anterior como la revista nuevos vehículos de influencia vanguardista sobre Miró y los jóvenes artistas catalanes. 


Un voluntario catalán en el Ejército francés.

Dupin (1993) apunta que esta época bélica no dañó gravemente la viveza intelectual de la ciudad de Barcelona —lo que por nuestra parte es válido si se hace abstracción de la ola conservadora que surge desde mediados de 1917—:
‹‹Entonces, entre todos los jóvenes pintores, escritores y poetas con quienes alternaba Miró, reinaba una efervescencia extraordinaria. Barcelona es ya, en dicha época, un centro cultural y artístico extraordinariamente vivo, con los ojos puestos en París. Francia participa en la primera guerra mundial y todos los catalanes de izquierdas se solidarizan con su causa: 10.000 voluntarios engrosan las filas de los aliados. Añadamos a ello, para los artistas y los escritores, una viva curiosidad por las nuevas tendencias que nacen en París y llegan casi inmediatamente a Barcelona. Se lee y se comenta con pasión “Les Soirées de Paris” que da a conocer a Apollinaire y a Cendrars, así como la revista “Nord‑Sud” de Pierre Reverdy, más cercana al cubismo, que aparecerá en un bodegón de Miró y le dará su título. También se sigue la revista de vanguardia “L’Instant”, dirigida por Pérez y Jorba, para la que Miró dibuja una portada que aparecerá al mismo tiempo en Barcelona y París. Los poetas, entre ellos Apollinaire y Whitman, se traducen al catalán. En el Liceu, en 1917, se pone en escena el ballet Parade, de Satie, Apollinaire y Picasso, que se hizo célebre en Barcelona.››[3]

En este 1917 tan intenso históricamente Miró probablemente vive en Barcelona durante los primeros meses, hasta la primavera, trabajando junto a Ricart en el taller de Sant Pere Més Baix.[4] Probablemente pinta entonces Autorretrato (1917), La publicidad y florero (1917) y Nord-Sud (1917).[5] En este año aumenta su producción y muestra una gran seguridad técnica y estética, incorporando rasgos cubistas, futuristas y elementos simbólicos recurrentes en el resto de su obra (la mujer, la luna, los pájaros).
Establece una relación permanente con Dalmau, que será su marchante en sus primeros años y acude a las veladas vespertinas en su galería[6], un gran punto de reunión de artistas y escritores, donde conoce (es posible que sólo superficialmente) a Gleizes, los Delaunay, Marie Laurencin, Max Jacob y probablemente escucha a Francis Picabia[7], ­aunque parece que no le trata personalmente, y tal vez conozca al crítico Maurice Raynal[8], que será pocos años después uno de sus mejores introductores y defensores en París.
Es una época de forja de amistades importantes, que serán un apoyo fundamental en el transcurso de su vida y su carrera, como explica Giralt-Miracle:
‹‹Les de Miró foren unes amistats profundes i duradores i generalment estaven vinculades a la seva primera joventut. La comprensió i la vivència de l’art facilitaven l’aproximació a Miró, per això no és estrany que els seus amics —artistes i artesans, escriptors i poetes, fotògrafs i arquitectes, atrets i seduïts per la potència del personatge i del seu quefer— esdevinguessin els homes de confiança de les seves grans decisions, als quals consultava sovint.››[9]
En esta época confirma el núcleo fundamental de los amigos a los que se vinculará gran parte de su vida: Prats, Gasch, Artigas, Foix... Entabla amistad en este 1917 con su coetáneo J. V. Foix (1893-1987) cuando ambos coinciden como soldados en la misma leva y acostumbran salir juntos del cuartel; Foix a su vez le introduce en la poesía de vanguardia y le presenta al poeta y crítico Josep Maria Junoy (1897-1955). Es posible que conociera también al joven poeta Joaquim Folguera (1893-1919), amigo y compañero de Foix y Junoy en “La Revista”, pero Folguera murió prematuramente, aunque le dio tiempo a ser un eficaz introductor de las vanguardias francesas.


Sebastià Gasch.

Miró también conoce, muy probablemente en 1917, a Sebastià Gasch (1897-1980), que en 1968 explica: ‹‹Dalmau, en su tienda de la calle del Pino, me lo mostró un día...››[10], destacando del joven Miró su disciplina:
‹‹Al entablar conocimiento con él, uno experimentaba la sensación de que era un maniquí, recién escapado de un escaparate, y que llevaba en los labios la sonrisa comercial que se veía obligado a insinuar ante los transeúntes. Sólo cuando hablaba, lo que sucedía raras veces, desaparecía el muñeco de cartón y afloraba a sus ojos una lucecita de luciérnaga antediluviana. Hablaba muy poco de sí, y cuanto tomaba la decisión de hacerlo, decía cosas completamente anodinas. Llevaba una vida ordenadísima, de una regularidad cronométrica.››[11]


Lola Anglada.
 
Lola Anglada es una de las pocas relaciones femeninas seguras de Miró en esta época. Recuerda su educación artística y su amistad con Miró y demás compañeros de taller:
‹‹D’allí [la Llotja] vaig passar a l’acadèmia de Francesc Galí. Era molt bon mestre, però em va dir. amira, més m’estimaria que no vinguessis més. Vine sempre per amistat, perquè testimo molt, però com a deixebla, no. Jo més aviat et desoriento. Tu ja tens el teu camí obert, la teva manera de pensar..., no en tinguis més de mestres. Fes-ho tu sola.” I no hi vaig anar més.
Llavors coneixia ja en Miró, en Ricart, en Ràfols..., i vam decidir posar un estudi en comú, un taller, a un pis que el pare va trobar a l’avinguda Claris. Allí trevallàvem molt, fins que ens va agafar la dèria d’anar a París. A en Joan Miró i a en Ricart els vaig arreglar el viatge jo, des d’aquí. Tenia una amiga francesa, el pare de la qual regentava un hotel i els hi vaig adreçar.
Més tard, jo mateixa hi vaig anar, a París, cap a l’any vint-i-dos o vint-i-tres.››[12]
Lola Anglada nunca se casó, aunque tuvo pretendientes, en especial compañeros del taller y entre ellos parece bien probable que se contara Miró, pues ella misma, comentando algunas declaraciones amorosas que recibió en aquella época dejó entrever que rechazó una propuesta suya:
‹‹Si m’hagués casat no hauria pogut fer tot el que he fet: Una dona casada ha de viure per a la família. Tenir un art i ésser casada no pot ésser. Art i matrimoni són enemics. I no em dol, no. Al contrari, si fos casada se me’n va el cap. Tants com m’han volgut... Mare de Déu! Si fes una llista... Fins i tot m’havien demanat al meu pare sense dir-me res a mi. Quan pensava amb els fills... (...) Hi havia amics meus que venien a pintar amb mi. Mho deien: En tal, et va al darrera.” Un dia un amic meu [la referencia a Miró, por su manera de hablar, es evidente] em diu: Escolta, jo testimo molt. El que et diré tho has de pensar molt. Què testimes més, el dibuixar o jo?” De seguida li vaig dir: El dibuixar”. Ell que em fa: “com es que ho dius tan de pressa?”. I li responc: “com que em dónes a triar, senyal que no mestimes, o sigui que tu a casa teva i jo a la meva!”.
Una altra vegada, el pare dun pretendent meu [otra vez reconocemos las maneras de los Miró] em diu: Escolta, que no testimes el meu fill?” I jo li vaig respondre: “miri, si el seu fill em veu a mi de la mateixa manera que dibuixa estic ben fotuda!”. No, el matrimoni no era per a mi.››[13]
El mismo Miró parece expresar su pasión espiritual por la joven (su “Beatrice”) un tanto herméticamente en una carta a Ricart de septiembre de 1917: ‹‹(...) en vaig anar les dos tardes dels dos dies que vaig ser a Barcelona, a veure a la nostra amiga Lola A. a Tiana. (...) allunyat como el Dant de la realitat (vas entenent tot això?) m’han reclós dintre mi, i a mida que m’he anat tornant un escèptic en tot lo que’m voltava, m’he anat acostant a Déu, als Arbres i Muntanyes, i a Amistat. Un primitiu com aquella gent de Ciurana i un enamorat com el Dant. (...)››[14]


Catálogo de *<Exposition d’Art Français> en Barcelona (1917).

Pinta en abril el Retrato de Vicenç Nubiola, y acude asiduamente a la fábrica de chocolate Cunill, donde se reúnen varios amigos. Miró visita en el Palau de Belles Arts de Barcelona la enorme *<Exposition d’Art Français> (23 abril-1 julio 1917) organizada por Vollard, donde figuran entre otros Daumier, Courbet, Degas, Manet, Gauguin, Cézanne, Monet, Seurat, Toulouse-Lautrec, Bonnard, Vuillard, Redon y Matisse.[15]
Desde esta época lee con mucha más frecuencia poesía francesa de Baudelaire, Mallarmé, Rimbaud, Verlaine, Apollinaire (Le Poète assassiné durante el servicio militar a finales de año)... y revistas de vanguardia catalanas y francesas a las que tuvo probable acceso como “Les Soirées de Paris” (1913-1914), “Sic” (1916-1919), “Nord-Sud” (1917), “391” (1917).[16]
Pasa el verano en Mont-roig, y visita Siurana, Prades, Cornudella y Cambrils.[17] Inicia la realización de 14 pinturas.[18] Son obras de predominio fauvista, durante el verano: paisajes de Mont-roig y los pueblecitos vecinos, como Prades —Prades, el pueblo (1917)—, Siurana, Cornudella, Cambrils, Vilanova; bodegones, retratos de amigos y conocidos, su primer autorretrato y asimismo su primer desnudo de una mujer sentada.
Cumple en Cataluña su tercer y último periodo de servicio militar. Primero durante unos días de agosto, en los que, aunque Miró no dispara, su regimiento participa en la represión de la revolución, que se había desarrollado en Sabadell como una huelga general durante los días 13-20 de agosto.[19] Esta participación de Miró se desarrollaría hacia el 18-25 de agosto, pues el 18 llega a Barcelona[20] y en pocas horas podía estar ya en la muy cercana ciudad de Sabadell, donde está con seguridad a partir del 19[21], y hacia el 25 ya está de vuelta en Mon-roig[22]. Después del 26 ya viaja a Cambrils.[23] El 13 de septiembre escribe desde Mont-roig a Ràfols sobre las pinturas, la mayoría paisajes, que está pintando.[24] Hacia el 30 de septiembre a medianoche llega en tren a Barcelona, a tiempo para incorporarse al servicio militar, y ese mismo día se encuentra con su amigo Ramon Sunyer en el Passeig de Gràcia.[25]
Acaba de cumplir el servicio entre el 1 de octubre y el 31 de diciembre.[26] En este tiempo lee a Apollinaire[27] y, en el Ateneo de Barcelona, las cartas de Van Gogh[28]. Continúa pintando con Ricart en el taller de Sant Pere Més Baix[29], para preparar la exposición en las Galeries Dalmau para febrero de 1918.[30]


Fragmento del ballet Parade. 2:48. [https://www.youtube.com/watch?v=_Chq1Ty0nyE]  

El 10 de noviembre asiste a la representación de los Ballets Rusos de Parade, en el Liceu de Barcelona.[31] Cuenta con decorados de Picasso, a quien tal vez sólo le presentan brevemente[32]; probablemente, también asiste a las representaciones de El pájaro de fuego y de Cleopatra; su interés por la danza se plasma en sus primeros dibujos de bailarinas.
Finalmente, visita en las Galerías Dalmau la exposición <Rafael Barradas> (1-15 diciembre 1917), al mismo tiempo que otra de Torres García.

NOTAS.
[1] Grant, Kim. Surrealism and the Visual Arts. Theory and Reception. 2005: 32-34.
[2] Falgàs, Jordi. Gleizes and Picabia at Galeries Dalmau: Too Green for Our Teeth. *<Barcelona and modernity. Picasso, Gaudí, Miró, Dalí>. Cleveland. Cleveland Museum of Art (2006-2007): 319-327. Una lista de artistas venidos a Cataluña en p. 319, destacando que casi todos llegaron entre finales de 1915 y la primavera de 1916.
[3] Dupin. Miró. 1993: 47-48.
[4] Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 319, n. 43. Se queja de que no hay suficiente documentación para precisar dónde estuvo en el invierno-primavera 1917. Apunta sólo que Miró y Ricart compartirían el taller de Sant Pere Més Baix basándose en dos documentos, una tarjeta postal de Miró a Ricart. Barcelona (junio o julio 1917) BMB 453, y una carta (sin fecha, posiblemente de 1-X-1917) BMB 452.
[5] Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 319.
[6] Lubar. Joan Miró Before The Farm, 1915‑1922: Catalan Nationalism and the Avant‑Garde1988: 73, n. 32, basándose en Joan Miró, vida y testimonio. 1975: 119. / Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 45, y apunta una declaración de Miró a Raillard. Ceci est la couleur de mes rêves. 1977: 19. / Raillard. Conversaciones con Miró. 1993: 24.
[7] Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 46, señala que quizás se conocieran entonces Miró y Picabia. La nota que acompaña es muy prolija en detalles sobre esta cuestión abierta, porque la mayor parte de la historiografía y el propio Miro coinciden en datar su encuentro en 1917, pero los documentos lo postergan hasta un decenio.
Coinciden en fechar un primer encuentro en 1917: Dupin. Miró. 1962: 64, 494, que considera que Dalmau le presentó a Picabia y Raynal, pero en conversación con Umland en marzo de 1992 precisó que Miró sólo le dijo que había visto al primero a finales de los años 10 [Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): n. 46, p. 346.]. Rubin. <Miró in the collection of The Museum of Modern Art>. Nueva York. MoMA (1973-1974): 113, n. 24, apunta también un primer encuentro en 1917. / Barbara Rose. <Miró in America> (1982): 13, coincide. / Rowell. Joan Miró. Selected Writings and Interviews1986: 22, data el primer encuentro en 1917, cuando Picabia publicaba “391” en Barcelona. / Rowell. Joan Miró. Écrits et entretiens. 1995: 30, elimina la referencia a Picabia, probablemente haciéndose eco de las primera dudas bien fundamentadas. / Rowell. Joan Miró. Escritos y conversaciones. 2002: 43, tampoco lo menciona. / Malet. Obra de Joan Miró. FJM. 1988: 466.
Son escépticos sobre un primer encuentro en 1917: Lubar. Joan Miró Before The Farm, 1915‑1922: Catalan Nationalism and the Avant‑Garde1988: 73, n. 32, se refiere a la carta de Miró a Picabia. París (10-VI-1925) en la que precisa que espera conocerle. / Combalía. El descubrimiento de Miró. Miró y sus críticos, 1918-1929. 1990: 45. / M.L. Borràs en conversación con Lanchner [Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): n. 46, p. 346.]. Cabe añadir a Dupin y Rowell, que han cambiado de opinión y, como Umland, ya sugieren que tal vez en 1917 había sólo una presentación personal, sin una relación.
[8] Dupin. Miró. 1962: 64, considera que Dalmau puso en contacto a Miró y Raynal, pero que su primer encuentro fue en el primer viaje a París (entonces consideraba que 1919, y actualmente en 1920). Rowell informa en sus tres versiones que Dalmau les presentó en 1917. [Rowell. Joan Miró. Selected Writings and Interviews. 1986: 22. / Rowell. Joan Miró. Écrits et entretiens. 1995: 30. / Rowell. Joan Miró. Escritos y conversaciones. 2002: 43.] Miró le contó a Brassaï que fue Picasso quien le presentó a Raynal [Brassaï. The Artists of My Life. 1982: 143.], lo que lo dataría en 1920 o incluso en 1921, cuando debieron concidir necesariamente porque Raynal le escribió el prefacio para su exposición en La Licorne. Por su parte, Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 46, apunta que es posible su contacto en 1917.
[9] Giralt-Miracle, Daniel. Les energies” vitals i creatives de Joan Miró. 1993: 12.
[10] “Tele-Expres” (20-XI-1968).
[11] Gasch. Cuaderno “Cobalto”, nº 2 (según Cirlot es el nº 5). Surrealismo. Barcelona. 1948. Cit. Cirlot. 1949: 10. / Gasch, S. Los comienzos de Joan Miró. “ABC” (1-X-1964) 65. Se explaya sobre su encuentro en 1918 en el Cercle de Sant Lluc y destaca su modestía y su dificultad para dibujar. / Gasch, S. Las pinturas murales de Torres García, recuperadas. Evocación de un ambiente y de un gran artista irascible. “ABC” (22-IV-1966) 85. Evoca a Miró, rechoncho, en el Cercle de Sant Lluc, como el alumno más asiduo a las clases de dibujo.
[12] Canals, Enric. Conversa amb Lola Anglada. “LAvenç”, 13 (II-1979) 14-18. Cit. 15. Los Canals han deslizado un error sobre las fechas de su viaje a París, que según ellos sería hacia 1918: ‹‹comparteix un estudi amb Joan Miró o Enric Ricart, fins que als vin-i-dos anys (sic) marxa a París.›› [Canals, Josep; Canals, Enric. Barcelona vista per Lola Anglada. “L’Avenç”, 12 (I-1979) 66-71. Cit. 66]. Probablemente, es un error de erudición, porque aparte del recuerdo de Anglada está el hecho de que en la correspondencia de sus amigos no figura noticia alguna de que esté en París en 1918-1921, además de que es improbable que fuera a Francia tan pronto. En cuanto a la época en que trabajó con el grupo Courbet al menos es 1916-1919, pues Ràfols explica que en enero de 1919 Lola Anglada está trabajando en el grupo, dibujando muy bien; y que no ha visto a Miró. [Carta de Ràfols a Ricart. Barcelona (3-I-1919) BMB].
[13] Canals, Enric. Conversa amb Lola Anglada. “L’Avenç”, 13 (II-1979) 14-18. Cit. 17-18. Es muy probable que Miró fuera el primer pretendiente al que se refiere ella, porque concuerda plenamente con su manera de hablar y sus ideas sobre la mujer. Más allá de estas declaraciones, si hubo una relación esta fue breve e imposible, porque él no tenía aún dinero para mantener una familia. Anglada, ya anciana, dejará entrever en declaraciones privadas que eran amantes (el término no implica necesariamente tener relaciones íntimas), lo que se ha aceptado como cierto por algunos especialistas.
[14] Carta de Miró a Ricart. Mont-roig (domingo, IX?-1917). 2 hojas. BMB 449.
[15] Rowell. Joan Miró. Selected Writings and Interviews. 1986: 22-23. / Rowell. Joan Miró. Écrits et entretiens. 1995: 30. / Rowell. Joan Miró. Escritos y conversaciones2002: 43. / Lubar. Joan Miró Before The Farm, 1915‑1922: Catalan Nationalism and the Avant‑Garde1988: 88, 256. / Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 47.
El catálogo de la muestra se publicó en la Librairie Française, con el título *<Exposition d’art français, 1917>, promovida por la Municipalité de Barcelona. Algunas fuentes la datan por error en 1916, como Risatti, Howard. Miró & Dubuffet. *<Dubuffet. Miró: Selections from the Acquavella Collection>. Reno. Nevada Museum of Art (1997): 14.
[16] Rowell apunta que leía poesía y revistas de vanguardia catalanas (da una breve lista)y francesas como “Les Soirées de Paris” de Apollinaire, “Sic” y “Nord-Sud”. [Rowell. Joan Miró. Selected Writings and Interviews. 1986: 7. / Rowell. Joan Miró. Écrits et entretiens. 1995: 15. / Rowell. Joan Miró. Escritos y conversaciones. 2002: 25.] Lubar explica lo mismo [Lubar. Joan Miró Before The Farm, 1915‑1922: Catalan Nationalism and the Avant‑Garde1988: 256] Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 44, resume que leía poesía catalana y francesa de vanguardia y las revistas “Sic” y “Nord-Sud”. Por su parte, Laugier; Beaumelle; Merly. Chronologie 1917-1934. <Joan Miró 1917-1934. La Naissance du monde>. París. MNAM (2004): 301, señalan que leía revistas francesas y catalanas de vanguardia en las Galerías Dalmau en el último trimestre de 1917, mientras acababa el servicio militar. Lax; Bordoy. Cronología, en AA.VV. Miró. Fundació Pilar i Joan Miró a Mallorca. 2005: 509, n. 60, asumen el parecer de Laugier; Beaumelle; Merly.
[17] Rowell. Joan Miró. Selected Writings and Interviews. 1986: 23, limita las visitas a Siurana, Prades y Cambrils, sin Cornudella. / Rowell. Joan Miró. Écrits et entretiens. 1995: 30, idem / Rowell. Joan Miró. Escritos y conversaciones2002: 43, idem. / Lubar. Joan Miró Before The Farm, 1915‑1922: Catalan Nationalism and the Avant‑Garde1988: 256, 293. / Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 48, que apunta un viaje a Cornudella de acuerdo a una carta de Miró a Ricart. Mont-roig (sin fecha, ¿26-VIII-1917) BMB 449.
[18] Carta de Miró a Ricart. Barcelona (lunes, ¿1-X-1917?) BMB 452. [Rowell. Joan Miró. Selected Writings and Interviews. 1986: 52, da esa fecha como probable. / Rowell. Joan Miró. Écrits et entretiens. 1995: 62, precisa la fecha como segura, en atención a que Miró empezaba entonces el servicio militar. / Rowell. Joan Miró. Escritos y conversaciones. 2002: 88, idem.
Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 49, que apunta que no es segura la fecha de finalización de Prades, el pueblo, de acuerdo a una carta de Miró a Ricart. Barcelona (¿19-VIII-1917?) BMB 448, y Rudenstine. Peggy Guggenheim Collection, Venice. 1985: v. II, 518.
[19] *<Homage to Barcelona. The city and its art. 1888-1936>. Londres. Hayward Gallery (1985-1986): 299. / Lubar. Joan Miró Before The Farm, 1915‑1922: Catalan Nationalism and the Avant‑Garde1988: 64 (n. 2), 256. / Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 50, que cita dos artículos de la época de M. Sarmiento. En Sabadell. “La Publicidad”, Barcelona, v. 40, nº 13785 (19-VIII-1917) 4; La huelga general. “La Publicidad”, Barcelona, v. 40, nº 13787 (21-VIII-1917) 3.
[20] Carta de Miró a Ricart. Barcelona (domingo, que sólo puede ser 19-VIII-1917) BMB 448. Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 51, concluye que Miró llegó a Barcelona el 18 de agosto.
[21] Carta de Miró a Ricart. Mont-roig (domingo, ¿26-VIII-1917?) BMB 449. [Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 52.]
[22] Carta de Miró a Ricart. Mont-roig (domingo, ¿26-VIII-1917?; es el único domingo de agosto en 1917-1919) BMB 449. [Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 53, que apunta que Miró escribe que llegó a Mont-roig el día anterior.
[23] Carta de Miró a Ricart. Mont-roig (domingo, ¿26-VIII-1917?) BMB 449. [Lubar. Joan Miró Before The Farm, 1915‑1922: Catalan Nationalism and the Avant‑Garde1988: 256, 308. / Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 54.
[24] Carta de Miró a Ràfols. Mont-roig (13-IX-1917). [Soberanas; Fontbona. Miró. Cartes a J.F. Ràfols, 1917/19581993: 19. / Rowell. Joan Miró. Selected Writings and Interviews1986: 50. / Rowell. Joan Miró. Écrits et entretiens. 1995: 60. / Rowell. Joan Miró. Escritos y conversaciones. 2002: 86. / Cit. Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 55.]
[25] Carta de Miró a Ricart. Barcelona (lunes, ¿1-X-1917?) BMB 452. [Rowell. Joan Miró. Selected Writings and Interviews. 1986: 52, y nota sobre fecha de la carta en 308, n. 15. / Rowell. Joan Miró. Écrits et entretiens. 1995: 61. / Rowell. Joan Miró. Escritos y conversaciones. 2002: 88. / Combalía. El descubrimiento de Miró. Miró y sus críticos, 1918-1929. 1990: 39-40, 40-41 (n. 24), la data hacia II.1918. / Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 56, apunta que es más probable de octubre, porque Miró escribe que todavía está haciendo el servicio militar, que acabó el 31 de diciembre.
[26] El inicio de este periodo el 1 de octubre se concluye de las cartas de Miró a Ràfols (13-IX-1917) y a Ricart. Barcelona (lunes, ¿1-X-1917) BMB 452. [Rowell. Joan Miró. Selected Writings and Interviews1986: 52. / Rowell. Joan Miró. Écrits et entretiens. 1995: 61. / Rowell. Joan Miró. Escritos y conversaciones. 2002: 88.] Rowell se basa en ellas para datar su último periodo de servicio militar en 1 octubre-31 diciembre 1917 [Rowell. Joan Miró. Selected Writings and Interviews. 1986: 22-23. / Rowell. Joan Miró. Écrits et entretiens1995: 30. / Rowell. Joan Miró. Escritos y conversaciones. 2002: 43.] Su opinión la acepta Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 57. El final de su servicio militar el 31 de diciembre se concluye de una carta de Miró a Ricart. Barcelona (30-XII-1917). [Rowell. Joan Miró. Selected Writings and Interviews. 1986: 23. / Rowell. Joan Miró. Écrits et entretiens. 1995: 30. / Rowell. Joan Miró. Escritos y conversaciones. 2002: 43. / Cit. Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 63.]
[27] Raillard. Ceci est la couleur de mes rêves. 1977: 49. / Raillard. Conversaciones con Miró. 1993: 60. / Rowell. Joan Miró. Selected Writings and Interviews1986: 23. / Rowell. Joan Miró. Écrits et entretiens1995: 30. / Rowell. Joan Miró. Escritos y conversaciones. 2002: 43. Cit. Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 59.
[28] Carta de Ràfols a Ricart (19-X-1917). [Lubar. Joan Miró Before The Farm, 1915‑1922: Catalan Nationalism and the Avant‑Garde1988: 79-80 (n. 47). Cit. Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 61.]
[29] Carta de Miró a Ricart. Barcelona (lunes, ¿1-X-1917) BMB 452. [Rowell. Joan Miró. Selected Writings and Interviews. 1986: 52. / Rowell. Joan Miró. Écrits et entretiens. 1995: 61. / Rowell. Joan Miró. Escritos y conversaciones. 2002: 88. / Lubar. Joan Miró Before The Farm, 1915‑1922: Catalan Nationalism and the Avant‑Garde1988: 284. /Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 58.
[30] Carta de Miró a Ricart. Barcelona (lunes, ¿1-X-1917) BMB 452. [Rowell. Joan Miró. Selected Writings and Interviews. 1986: 52-53. / Rowell. Joan Miró. Écrits et entretiens1995: 61-63. / Rowell. Joan Miró. Escritos y conversaciones. 2002: 88-90. / Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 60, apunta que la trad. de Dupin. Miró. 1962: 61 es diferente de la de Rowell.]
[31] Lubar. Joan Miró Before The Farm, 1915‑1922: Catalan Nationalism and the Avant‑Garde1988: 142, 256. Cit. Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 62. Los Ballets Rusos habían estado en Barcelona entre el 23 y el 30 de junio y volvieron en el otoño, cuando Miró acudió a ver la presentación del ballet Parade. [https://ca.wikipedia.org/wiki/Parade_%28Satie%29]
[32] Informan que Miró conoció a Picasso entonces Brassaï. The Artists of My Life. 1982: 142-143. / Cabanne. Pablo Picasso: His Life and Times. 1977: 193. Por contra, Miró especifica que no le conoció entonces en dos declaraciones: Melià. Joan Miró, vida y testimonio. 1975: 131. / Raillard. Ceci est la couleur de mes rêves. 1977: 50. y Raillard. Conversaciones con Miró. 1993: 61. Lubar concluye que Miró le conoció en París [Lubar. Joan Miró Before The Farm, 1915‑1922: Catalan Nationalism and the Avant‑Garde1988: 176, n. 29. Cit. Umland. <Joan Miró>. Nueva York. MoMA (1993-1994): 320, n. 62.] Para un estudio más profundo véase el apartado de la relación personal Miró-Picasso de esta investigación, que no incluimos aquí porque afecta a sus relaciones familiares, que escapan de los límites cronológicos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario